Fue en 1756 cuando Francisco Salzillo Alcaraz, hombre de fe además de sublime escultor, volvió a realizar un "milagro". La Real y Muy Ilustre Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno, había decidido entonces reemplazar la imagen de La Soledad, que desde el año 1601, procesionaba en Murcia cada Viernes Santo.
El periodo de renovación emprendido por la Cofradía de Jesús a mediados del siglo XVIII, tuvo su reflejo una vez más en el encargo a Salzillo en el año 1753 del grupo o insignia de la Oración del Huerto.
El próximo 12 de mayo se conmemorará el CCCX aniversario del nacimiento del ilustre murciano Francisco Salzillo y Alcaraz. Así que, desde LovingMurcia, nos proponemos inaugurar una semana singular en la memoria del gran escultor.
El próximo 30 de mayo, el Museo Salzillo cumple 76 años. Se constituyó así como el segundo museo más antiguo de la ciudad y la actual Región de Murcia y fue creado por el Estado tras diferentes intentos desde comienzos del siglo XX, aunque ya desde el siglo XIX la iglesia privativa de Jesús era visitada por los viajeros que venían a la ciudad y que pedían su constitución como museo.
En la iglesia de San Lorenzo de Murcia, en la elipse principal de este templo neoclásico, una bella Virgen Dolorosa, un tanto olvidada, aguarda paciente en su camarín el momento de recuperar una devoción particular, perdida con el paso del tiempo y de nuestra mala memoria. Fue el escultor Francisco Salzillo, hijo de la ciudad de Murcia, quién dotó de vida y sublime belleza a Nuestra Señora de los Dolores, y aunque no exista, por el momento, contrato o rúbrica que lo cerciore, baste la suave traza de su rostro y la profunda mirada de sus ojos clamando al cielo para confirmar la autoría del genial escultor.